Un hombre acusado de robar una rosquilla que costaba 52 centavos de dólar, podría enfrentar una pena de hasta 30 años de cárcel.
Las autoridades dijeron que Scott A. Masters, de 41 años, se metió una rosquilla en un bolsillo de su buzo, y luego empujó a la empleada de una tienda que intentó impedirle que huyera del lugar sin pagar.
El simple empujón es considerado como una agresión leve. Y eso transforma el delito menor de hurto en robo con violencia. En ese caso, el término de cárcel es de entre cinco y 15 años. Pero, como Masters tiene además un prontuario criminal, la fiscalía dijo que pedirá una pena de 30 años de prisión.
"¿Robo con violencia? ¿Por una rosquilla? Esto es imposible", declaró Masters al periódico Saint Louis Post-Dispatch de la cárcel. Si bien admitió llevarse el pastel, negó haber tocado a la empleada. "De ninguna manera hubiera empujado a una mujer por una rosquilla", aseguró.
Pero el jefe de policía de Farmington, Rick Baker, dijo que las leyes del estado de Misurí tratan el hurto acompañado de agresión como si se tratara de robo de propiedad mediante un acto de violencia. No importa la fuerza empleada o el valor de lo robado, explicó Baker.
"No se trata de la rosquilla", dijo el jefe de policía, "sino de la agresión".
Masters lamentó que ni siquiera pudo disfrutar de sus ganancias malhabidas: mientras huía, tiró la rosquilla al suelo.
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